jueves, 14 de mayo de 2015

Reseña Ferdinand de Saussure. Curso de lingüística general. II Parte-Lingüística sincrónica

Angie Cepeda, Laura Gómez y Dina Riaño
Buenos Aires: Losada. 1945 

Ferdinand de Saussure
Detrás de las conversaciones ambiguas que los seres humanos utilizan para relacionarse con sus semejantes, existe una ciencia que define y categoriza la lengua rigurosamente. Este sistema fue creado por Ferdinand de Saussure (18571913) suizo apasionado por el estudio de la lingüística, Saussure con su planteamiento diferenció el habla de la lengua. Logró consolidar la lingüística como ciencia. Es nombrado profesor de gramática comparada de la Escuela de Estudios Superiores de París y de la Universidad de Ginebra. Las ideas de Saussure fueron tan  innovadoras que al morir, dos de sus estudiantes (Charles Bally y Albert Sechehaye) deciden recopilar sus notas para publicar un libro que se convertiría en un clásico de la lingüística. Este libro se publica en 1916.

Saussure desarrollo sus ideas en suiza a finales del siglo XIX y principios del XX. «Fue en la universidad de Leipzig-Alemania donde tuvo como influencia a los neogramáticos (lingüistas que conformaron una escuela de pensamiento lingüístico) quienes buscaban renovar los métodos del estudio de la gramática comparada» (Osorio, Marybel; 2015). Saussure considera que el método utilizado por los neogramáticos no era el adecuado. Crea su propio sistema que lo posiciona como el padre de la lingüística contemporánea.

El valor lingüístico se define como la unión del significante (imagen acústica, símbolo) y su significado (concepto). Saussure basa la lingüística en la diferenciación negativa, «Su más exacta característica es la de ser lo que los otros no son, tibio es lo que no es frío ni caliente» (Bally, Sechehaye, 1945, Pág. 141).
 La lingüística define las relaciones sintagmáticas y paradigmáticas que le dan sentido y funcionalidad a la lengua. En el texto se plantea la unidad como una asociación entre concepto e imagen acústica. Saussure critica dos teorías que podrían constituir a la unidad principal: la palabra y la oración.

La identidad, la realidad y los valores nos darán una noción primordial acerca de la idea de la unidad. La realidad más que una observación es la clasificación que le damos al concepto y la fónica. La identidad no es una misma porción de sonoridad con la misma significación ya que no en todos los casos es reciproca su connotación, «No sé nada» y «No le digas nada de esto» contienen el mismo elemento, pero su sentido no es el mismo. El sentido y el valor permanecen aún si cambia el objeto. El valor es la función, la cualidad de una unidad que determina la identidad. Saussure expone el siguiente ejemplo «Una comparación con el juego de ajedrez nos lo hará comprender. Tomemos un caballo: ¿Es por sí mismo un elemento del juego? Seguramente no, porque con su materialidad pura, fuera de su casilla y de las demás condiciones del juego, no representa nada para el jugador y no resulta elemento real y concreto más que una vez que este revestido de su valor y haciendo cuerpo con él» (Bally, Sechehaye, 1945, Pág. 134).

Al definir la unidad, sus características y sus componentes, se pueden estudiar sus relaciones.   Estas son pruebas de actividad mental que le dan vida a la lengua. Pueden ser de dos tipos, sintagmáticas y asociativas. Las sintagmáticas son la unión de dos o más unidades representadas en cadena. Son consecuencia una de la otra, siguen un orden de sucesión y número lo que hace posible la conversación. Las asociativas o paradigmáticas, son individualidades que se determinan por la memoria y enlazan un elemento común según las similitudes y diferencias posibles, puede ser por sufijo, significado o imagen acústica.
Por su parte la lengua es funcional por las relaciones establecidas entre fonética y concepto, entre asociación y sintagma, las relaciones independientes son escasas (si, no, gracias) por ello la mayoría son dependientes. Si un elemento cambia, el sentido lo hace también.


Otro tema tratado, son las motivaciones quienes facilitan la expresión de una idea.
Motivación es lo no arbitrario y es la existencia de una relación entre significado y significante.
Da origen a dos límites opuestos, un mínimo (lexicológico) y un máximo (gramatical relativo).
Donde el primero es natural y el segundo causal. Todo dentro de este rango se determina como la clasificación de la lengua. Existen dos niveles de motivación. El primero es cuando la unión de dos signos lingüísticos da como resultado un tercero, cuyo significado se puede apreciar fácilmente en sus dos primeros componentes es el caso de pelirojo (pelo+rojo= un pelo rojo). El segundo es cuando la unión de dos palabras logra un tercer sentido que no es ni lo uno ni lo otro. Ejemplo Rascacielo no es ni rasca ni cielo es una tercera definición, un edificio de gran altitud.

La lingüística estática como sistema de medios de expresión prescinde de la época y se constituye por morfología y sintaxis. Su primer constituyente es la categoría de palabras y sus  formas de conjugación, mientras el segundo emplea la forma.

Para el estudio sociológico es importante analizar y comprender el contexto, el trabajo y la vida de Saussure, porque es esta una gran innovación para el avance de la lingüística como ciencia. La sociedad en la que vivía era el resultado de construcciones históricas, que delimitan una forma de actuar y pensar. Es importante preguntarse ¿Qué llevo a un hombre, hace más de un siglo, a pensar en un nuevo sistema y en nueva ciencia?, ¿Cuáles fueron las situaciones históricas y el motivo que hizo que su capacidad mental se desarrollara más de lo normal?, ¿La lingüística ha sido tomada como ciencia débil a través de la historia?, ¿Y en la actualidad se le ha dado más importancia?

  

 Bibliografía

Osorio, Marybel, S.F., ¿Quién fue Ferdinand de Saussure?, Portafolio lengua lenguaje y habla.


Saussure, F. de. (1945). Curso de lingüística general (A. Alonso, Trad., C, Bally & A. Sechehaye, Eds). Buenos Aires: Losada. 

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